Salve, Madre, Salve, Reina del Cielo,
de la hermosura una estrella,
de la pureza el fulgor;
fuente del más puro amor,
nuestra esperanza está en Tí.
Salve, Madre, Salve, Reina del Cielo.
Si nuestras alas se quiebran,
al final de nuestro vuelo,
antes de llegar al suelo,
tus brazos, con amor se abran,
Salve, Madre, Salve, Reina del Cielo.
de la hermosura una estrella,
de la pureza el fulgor;
fuente del más puro amor,
nuestra esperanza está en Tí.
Salve, Madre, Salve, Reina del Cielo.
Si nuestras alas se quiebran,
al final de nuestro vuelo,
antes de llegar al suelo,
tus brazos, con amor se abran,
Salve, Madre, Salve, Reina del Cielo.